miércoles, 23 de mayo de 2007

Javier Bergia-Cedaceros 4



Dijo un poeta: "mi única patria es mi infancia". Cedaceros 4, el último disco de Javier Bergia es un homenaje al pasado. Un homenaje al ayer. Un homenaje al blanco y negro de las fotografías familiares. Un homenaje al amor adolescente. Un homenaje a la amistad de juventud. Un homenaje a los sueños que tuvimos y que nunca se cumplieron. Un homenaje a nuestros padres, a nuestra educación, a nuestros traumas, a nuestra vida.

Bergia consigue que algo tan particular como su vida, se convierta en algo universal… compartido… consigue que nos identifiquemos con sus historias.

Me gusta Cedaceros 4, entre otras cosas, porque Bergia retrata un Madrid que todos conocemos de una manera distinta a todo lo que se ha cantado sobre esta ciudad:

"Nochebuena, como siempre en la Plaza Mayor/ cuanta gente, calamares en cada rincón" o "y un Madrid en gris y negro/ con monóculo y sombrero/ dando palmas al sereno/ con su chuzo y el llavero"o "mediodía en un viejo café de Madrid/ camarero una copa y té de jazmín"… resumiendo, Madrid está muy presente en Cedaceros 4 (empezando por el título, una calle en la que Bergia vivió y en la que hoy ya no existe ni siquiera el edificio en el que habitaba)

Bergia concede algunos guiños al pasado más reciente en algunas canciones. Hay una de ellas que es dura de escuchar, ya que resume muy bien el triste mundo en que vivimos hoy. Desde aquel horrible 11 de Marzo de 2004 hasta las terribles situaciones que se viven en África, o en Cuba.

Guiños a Pablo Guerrero en "Reflejos Perdidos", por cierto, una de las canciones más optimistas que uno ha escuchado en los últimos tiempos. "La radio salta y dan las siete en el despertador/ Mayo viene con flores/ Junio con nuevos colores"

Bestial la canción "Epílogo" en la que Javier homenajea a su padre de un modo muy emotivo. La vida fue injusta con tantas buenas personas que tuvieron que exiliarse…

La colaboración de Ismael Serrano en la canción "Dulces años", es muy emocionante. "Cualquier tiempo pasado fue mejor" dice el refrán, y en esta canción Bergia recuerda con emoción "aquella vida sin tener que decidir", aquella vida en la que "no había que dormir, ni importaba el porvenir". Eso sí, la canción está recubierta de ese sentimiento tan crudo, pero tan real que se llama Nostalgia. Una nostalgia que duele, pero que nos hace recordar que, al menos, hemos vivido… hemos aprendido… hemos tenido experiencias… Como canta Ismael en la canción "Fueron días felices, que ya no volverán"… aunque Bergia le contesta muy optimista que "hay que echarle narices, otros días vendrán".

Estoy intentando, inútilmente, analizar todas las canciones de Cedaceros 4, sin darme cuenta del enorme error que estoy cometiendo. Las canciones las tiene que descubrir el oyente. La emoción de escuchar por primera vez una canción que emociona es irrepetible. Espero que estas pistas, estos pequeños detalles que he desvelado en este texto, ayuden a los amigos lectores a conseguir el disco y escucharlo con tranquilidad. Podría hablar de los malabarismos melódicos de Bergia. De los juegos de voces y los musicazos que han acompañado a Bergia en este viaje al pasado. Podría hablar del fantástico libreto con fotos de la vida familiar de Bergia. Podría hablar de la portada y el diseño de Moncho Otero. Pero no voy a hablar más. No voy a escribir más de Cedaceros 4. Me dispongo a escucharlo/disfrutarlo de nuevo. Hagan ustedes lo mismo. No se arrepentirán.

1.- Aquellos días
2.- Mitos y pautas
3.- 4 Gotas
4.- Cedaceros 4
5.- Por los mares de Cupido
6.- Nochebuena
7.- Epílogo
8.- La sopa boba
9.- La gula
10.- Dulces años
11.- Melancolía
12.- Bordado sobre tapiz
13.- Corazones de trapo
14.- Clavos rotos
15.- Reflejos perdidos

Víctor Alfaro

2 comentarios:

rosmeri dijo...

fui a ver a javier bergia,el sabado 26 de mayo,en cabañas de polendos(segovia)y me enamoró,es un monstruo.comprar su disco.

Romano dijo...

Comparto todo lo escrito por ti Victor,,,,

Felicidades a Bergia por tan bonito disco el cual ya aterrizo en Buenos Aires,,,,